Para efectos del simulador se utiliza la siguiente clasificación:

Crédito Personal. Es un crédito de consumo no revolvente* concedido a una persona física en la que una institución financiera pone a su disposición una cantidad de dinero hasta un límite especificado y durante un período de tiempo determinado.

Crédito de Nómina. Al igual que el crédito personal, es la disposición de una cantidad de dinero con un límite específico a un plazo establecido. Sin embargo, la diferencia con el crédito personal, es que el crédito de nómina se dirige y brinda a los empleados que reciben el pago de su salario mediante una cuenta de nómina emitida por una institución financiera.

En este crédito la persona cuenta con el respaldo de su nómina, ya que tiene como garantía el trabajo y la antigüedad que se tenga en él mismo.

¿Cuándo te conviene un crédito de nómina?

Si recibes tu sueldo en una cuenta de nómina y cumples con los requisitos que solicita la institución eres sujeto para un crédito de este tipo, ya que estos son dirigidos a los empleados que reciben el pago de su sueldo a través de este medio.

En el caso del crédito de nómina ofrecido por alguna Sofom, es necesario que la empresa donde trabajas tenga un convenio con esta institución, ya que las Sofomes otorgan este tipo de crédito a los trabajadores de las empresas que tienen acuerdos con ellas.

Si recibes tu sueldo en una institución diferente a la que ofrece un crédito de nómina que te interesa, existe un recurso llamado portabilidad de nómina, que es el derecho que tiene el titular de la cuenta en donde le depositan su sueldo de transferirlo a otra institución de crédito que elija, sin costo.

¿Cuándo te conviene un crédito personal?

Este tipo de crédito es dirigido a todas aquellas personas que cuenten con un trabajo en el cual se obtenga un ingreso fijo, sin importar si su sueldo lo reciben o no en una cuenta de nómina, sin embargo, en este caso la institución financiera solicitará una garantía o un aval que respalde el crédito.

*Crédito de consumo no revolvente es aquel que sólo se dispone una vez y por un plazo definido. No existe rotación del dinero, es decir, conforme el acreditado va liquidando su adeudo, no puede disponer nuevamente de los recursos.